sábado, julio 26, 2008

Anoche, mientras dormia

Anoche, mientras dormía
Del cansancio fatigado
No sé que sueño dorado
cruzó por la mente mía

Soñaba que te veía
Y que me estabas mirando
Y yo te estaba contando
Mi vida triste, muy triste

Y que desapareciste
Al despertarme llorando

Hay un cañaveral. (o ¡Ay!, ¡Un cañaveral!)
¡ Ya no hay remedio
Para mi mal!


Mayte Martín canta (ella dice:"canto sin cantar") en ese disco estupendo titulado Querencia que se vende por ocho euros en un montón de tiendas de remate. Vale su peso en besos, que se sepa.

martes, julio 15, 2008

Un fragmento

Foción dormía y ya soñaba que tripulando un tiburón llegaba a Europa. Y que un toro enguirnaldado salía a recibirlo con mugidos como carcajadas.
(José Lezama Lima, "Oppiano Licario", Ediciones Era, México 1977.)

sábado, julio 12, 2008

UNO VUELVE SIEMPRE A LOS MISMOS SITIOS DONDE AMÓ LA VIDA

Un par de soñadores: Lord Dunsany y Howard Philips Lovecraft. Y dos libros de cuentos: Los "Viajes al otro mundo", de Lovecraft y los "cuentos de un soñador". Ambos publicados en Alianza Bolsillo.




Primero conocí a Lovecraft, en aquella primera edición de Los Mitos de Chtulhu presentada por Rafael Llopis. El prólogo era extraordinario. Y la selección de relatos abría todo un fichero de autores desconocidos e incitantes. Lord Dunsany, autor de "Dias de ocio en el pais de Yann" era uno de ellos.



Ambos autores, el Lord y H.P.Lovecraft dicen de sí mismos que son "soñadores expertos".
Ambos nos cuentan que la geografía de su mundo onírico era tan estable
que, a voluntad, se dirigían noche tras noche, a determinados parajes
donde sabían de seguro que hallarían determinada fauna, tal aroma,
un culto particular a un dios específico, sus sacerdotes.
Ambos, no obstante, tenían inesperados encuentros con seres no previstos,
porque lo onírico es -nos dicen- alcanzable, pero no controlable.
Lord Dunsany fué primero, y con un estilo más bien sobrio, apenas se desparramó, apenas trampeó; Lovecraft tomó temas literalmente calcados de su predecesor, pero no lo plagió, fué más lejos y se permitió la exagerada longitud. En mi preferido de los relatos de esta selección, "En busca de la ciudad del sol poniente" creó pasajes,paisajes y paisanajes imperecederos.
Y ambos nos cuentan cómo,
en uno u otro momento
dirigían sus pasos -sus vuelos, sus inmersiones-
a una ciudad maravillosa
que resultaba ser finalmente
el hogar de su infancia.
(Leidos ahora por mí ya no me aportan sorpresa ni me excitan la imaginación; se me hacen pasmosamente ingenuos. Pero vuelvo a ellos y lo que sí que me despiertan es una sonrisa, el recuerdo de una librería de Pamplona, una residencia de estudiantes, un escalofrío...)

sábado, julio 05, 2008

adios con el corazon / que con el alma no puedo...


Querido Blog:

Voy a estar sin conexión a Internet hasta finales de Julio. sí que no podremos comunicarnos...

Me da lástima, pero casi que me congratula saber que el wi-fi no es omnipresente, que existen lugares agrestes adonde no llega. En este caso, la masa forestal del Montseny.

¿Qué tengo en mi lista de espera? Historias de la palma de la mano, de Yasunari Kawabata me está proporcionando inesperadas ideas. Y dos textos sobre sueños, uno de Ann Faraday y otro de Strephon Kaplan-Williams, ambos tan asociados al affaire Senoï. Y...

Esta noche, un largo sueño, discursivo, recitado, literario, lento, terminaba estando yo ante un terapeuta que interpretaba sueños. Lo hacía con soltura; no dogmatizaba, no adoctrinaba, daba libertad, espacio y gracia a sus trabajos. Pero él mismo, él mismo era un bufón, hinchado, como si en su interior hubiese un cassette que repitiese las mismas cosas; a pesar de que cada vez las aderezaba con una salsa distinta. Me sentía de acuerdo con él, interesado por él, pero al mismo tiempo, lejano a él, disgustado con él.

tal vez esta pausa obligada llegue en un buen momento, después de todo...

miércoles, julio 02, 2008

como el ciervo, que a la fuente de agua fresca va veloz

LA CIERVA BLANCA





¿De qué agreste balada de la verde Inglaterra,
de qué lámina persa, de qué región arcana
de las noches y días que nuestro ayer encierra,
vino la cierva blanca que soñé esta mañana?




Duraría un segundo. La vi cruzar el prado
y perderse en el oro de una tarde ilusoria,
leve criatura hecha de un poco de memoria
y de un poco de olvido, cierva de un solo lado.

Los númenes que rigen este curioso mundo
me dejaron soñarte, pero no ser tu dueño;
tal vez en un recodo del porvenir profundo


te encontraré de nuevo, cierva blanca de un sueño,
Yo también soy un sueño lúcido que perdura
Un tiempo más que el sueño del prado y la blancura.

jORGE lUIS bORGES