En los lejanos días del comienzo de este Blog presenté a don Girolamo Cardano y su "Libro de los sueños" http://anochecuandodormia.blogspot.com/2006/08/synesiorum-somniorum-omnis-gneris.html Gerolamo Cardano o Jérôme Cardan o Girolamo Cardan (1501 - 1576) fue un célebre matemático italiano , interesado además -según la wikipedia- en astrología, filosofía, juegos de azar y medicina.
En su Libro descubrí a un ser muy especial y también tan inagotable filón de imágenes que, conociéndome, dí por supuesto que aquello iba a ser un filón en el que buscaría a menudo minerales preciosos para subir al blog. Pero me equivoqué.
De vez en cuando, cuando los meses pasan dejando rastro leve, me doy una vuelta y me acerco a una puerta tras la que sé que Girolamo está escribiendo. Golpeo dos o tres veces con los nudillos, pero la puerta no se abre para mí. Acerco entonces la oreja a las jambas y puedo discernir el sonido de la pluma al escribir, (aunque en alguna ocasión más me ha pareceido que los sonidos eran más de haber en el cuartito gozosa coyunda que de grave erudicción). Comoquiera que sea, discretamente me retiro y le dejo entregado a sus quehaceres. Don Girolamo, cuando se entrega a algo, ¡se entrega a algo!
Ráfagas telepáticas me asaltan en ocasiones dándome información del estado de sus descubrimientos, que son muchísimos, mportantísimos y de variadísima índole. Para que se hagan una idea de la vastedad de sus intereses y de su cultura "renacentista", voy a abrir
al azar el Libro de los Sueños y transcribiré lo que encuentre:
Lo primero que encuentro es una declaración absoluta: "La finalidad última de los sueños es su utilización". Pag 317. Ni más, ni menos: "Todas las cosas -nos aclara- existe en orden a un fin". ¡Y el que venga atrás, que arree!.
"Ver en sueños setas saladas indica ayuda en la desgracia y el peligro" (p.175).
"Ver la sangre de la cigüeña significa veneno" (p.174)
"Quien se vea con la pierna depilada, perderá a sus auxiliares o parientes" (p.137)
"Soñar con que se tienen garras de león informa de que se tendrá la protección de los soldados de un príncipe" (p.127)
"Soñar con coronas de flores en la época de floraciós es siempre propicio, excepto si se sueña con narcisos, apios o cipreses" (p.188)
"en los sueños, las nueces, aunque no se coman, indican utilidad proveniente de un extranjero". (p.171).
"Los sueños en lo que aparecen los testículos y el miembro viril rígidos indican hernia" (p.200).
"Quien, en sueños, masturba a otro y tiene aptitud para la enseñanza, se convertirá en maestro de los hijos de este otro, si los tiene, pero como es raro que se den juntas todas estas condiciones, prestará a un tercero un torpe servicio" (p.148).
...y así todo el tiempo...
Entonces, un buen día, aprendiendo y deleitándome en el Café de Ocata, tuve una noticia de Cardano que me orientó en el tema de los ruidos amorosos y la verdad, me hizo alegrarme por nuestro autor.. Voy a copiarla aquí, dando al mismo el enlace al Blog de Don Gregorio: "Le bon maitre me le pardonne..."
He aquí lo que encontré en
http://elcafedeocata.blogspot.com/2007/06/de-arthepius-cardano.html
"Gilolamo Cardano ya había aceptado como parte de su dotación natural una frigidez de estatua; una frigidez tan contundente que no se veía alterada por ningún pensamiento relacionado con el sexo, lo cual, ciertamente, le proporcionada la concentración necesaria para no dejar de escribir. No por ello, sin embargo, se aliviaban sus preocupaciones existenciales.
Una noche inesperadamente tuvo un sueño que cambió completamente su vida. Soñó que se encontraba en un jardín llamado Paraíso, invadido por "un extraño deleite". Desde el interior vio más allá de la puerta de entrada a una hermosa muchacha vestida de blanco y sin excesivos adornos. Cuando salió del jardín para acercarse a ella, las puertas se cerraron a sus espaldas.
Intentó volver a entrar, pero se lo impidió un guardia que le dijo: "Estabas dentro, ¿por qué saliste?". "Así pues -confiesa Cardano-, como no sabía qué hacer, me puse a dar abrazos a la muchacha mientras ella a su vez me acariciaba."
Algunos meses después se topó en la calle con una muchacha exactamente igual a la soñada y se le abrieron todas las compuertas que habían estado hasta entonces conteniendo su deseo. Se casó con ella en cuanto pudo.
"Asombra contarlo, pero inmediatamente me convertí de capón en gallo y de eunuco en semental, de manera que de no haberme moderado, por fuerza me hubiera puesto en peligro de muerte." (esto es lo que les digo; que cuando se pone, se pone...)
A partir de entonces Cardano aconsejó a los intelectuales hacer el amor,
"porque no hay nada mejor para aligerar las preocupaciones".
No descarto que esta anécdota viva tranquila en alguna página del Libro de los sueños: Nunca lo he leído de corrido, ni lo haré. Me acerco a él, entro en un recinto fabuloso y salgo con la mano llena de piedrecillas fulgurantes. Y así -si me conozco, que, en fin, ya veis... -seguiré.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario