viernes, septiembre 25, 2009

en fin...

Impaciente, enfrenté sus duros ojos
y le lancé directa mi pregunta.
¿Qué son los sueños, Tatana?

¿Qué son los sueños? Unos contestan
que son imágenes que se nos proyectan
nocturnamente en blancas pantallas
como un regalo de nuestro ángel de la guarda.

Otros, que ideas que toman formas,
que pensamientos que se recubren
de ropas crípticas; que carnavales;
que el tiempo congelado mostrando sus vergüenzas.

Muy pocos creen que sean hitos
en un camino de desencuentros
en los que vienen por fin a vernos
los parientes de los hijos de los dioses
.

Muy pocos que sean códigos
que viajeros indetectables
utilizan para encontrarse
entre nudos de cuerdas de estrellas cristalinas.


Palabras de los peces, venenosas
excrecencias del cráter sulfuroso,
excrementos diabólicos, plata pura
que se decanta de las radículas de los eucaliptus.

Pañuelos de miseria, sepiolitas,
intentos matemáticos del aire,
besos apenas fotografiados,
pelos de cabra.


¡Qué qué los sueños son, pregunta ese!
¡Que pregunte primero quienes somos
las agudas discípulas del nardo,
las que languidecemos custodiando a las abejas!


No hay comentarios: